Sostenibilidad ambiental, económica y social
Sostenibilidad integral de UNIMER
La agricultura sostenible, en el uso de los recursos y en las técnicas de producción, tiene el objetivo de no alterar el equilibrio del ecosistema, es respetuosa con el medio ambiente, económicamente ventajosa para el agricultor y socialmente justa, ayudando a mejorar la calidad de vida de los agricultores y de la sociedad en su conjunto. Por tanto, tiene relevancia para el medio ambiente, la economía y la sociedad.
UNIMER siempre ha promovido un enfoque cuidadoso de la agricultura sostenible, persiguiendo los siguientes objetivos:
- conservación en el tiempo de la fertilidad del suelo y los recursos ambientales;
- rentabilidad para el agricultor;
- protección de la salud y el bienestar de todas los stakeholders, empleados, operadores del sector y consumidor final;
en línea con el documento de Política Agrícola y del Pacto Verde de la Unión Europea, que en agricultura se expresa con la estrategia “De la Granja a la Mesa”:
- construir un sistema alimentario sostenible;
- integrar una nueva estrategia de biodiversidad;
- contribuir a la acción climática;
- contribuir a un plan de acción para la eliminación de la contaminación, salvaguardando los recursos naturales como el agua, el aire y el suelo;
compartida por el modelo de producción y consumo conocido como Circular Economy, que se basa en el principio de un reciclaje virtuoso y responsable de residuos, de subproductos agrícolas y de desperdicios alimentarios, siempre practicado por UNIMER en la producción de sus productos fertilizantes, compatibles con el medio ambiente.
Conservación de la fertilidad del suelo
Rentabilidad para el agricultor respetando el medio ambiente
Para UNIMER, la sostenibilidad también significa garantizar, a los agricultores que eligen sus fertilizantes, cosechas de excelente calidad y cantidad, capaces de cumplir plenamente los objetivos de sostenibilidad económica de la agricultura moderna. Esto es posible en virtud de la mayor eficiencia de la fertilización UNIMER que permite incrementar la proporción asimilable de nutrientes por los cultivos, limitando así las pérdidas relacionadas con fenómenos como lixiviación, volatilización, fijación e insolubilización, con un impacto positivo en la disminución de la contaminación, tanto de los acuíferos como en la emisión de gases de efecto invernadero a los que las actividades agrícolas contribuyen, directamente e indirectamente.